Chilpancingo, Gro., 20 de diciembre
del 2012
COMUNICADO DE
PRENSA
El despliegue de fuerza militar y policiaca
que acompañó a Peña Nieto en su reciente visita a nuestro Estado ante todo
refleja un enorme distanciamiento respecto al pueblo: rodeado de operativos
insultantes para el pueblo y vallas metálicas que agraviaron hasta a los mismos
funcionarios y políticos del gobierno del estado, Peña Nieto es la viva imagen
de un gobernante carente de legitimidad. Resulta paradójica la expresión del Gobernador Aguirre, respecto
a que en Guerrero ya querían ver a un gobernante cercano al pueblo, cuando la
realidad lo contradice tajantemente.
Se equivoca el que que compró la Presidencia
cuando afirma que Guerrero es un estado que ha sido generoso con él, ya que es
bien sabido que el pueblo guerrerense no lo apoyó y que su voto fue para Andrés
Manuel López Obrador.
Es indudable que más que apoyar a Guerrero,
Peña nieto vino a auscultar el terreno y a generar las condiciones para
desmantelar el carácter progresista y de lucha del pueblo guerrerense. Seguramente
trajo a Rosario Robles para lograr esos objetivos. Tampoco oculta su vinculación
y dependencia de Carlos Salinas de Gortari cuando designa a la sobrina de éste como
Secretaria de Turismo con intención de posicionarla para proyectos futuristas.
Sus afirmaciones de que quiere ver a Guerrero
con menor desigualdad y con mayores oportunidades
son enteramente demagógicas, porque la política económica y social que aplicará
no es otra que la continuación de las políticas neoliberales que han
empobrecido a nuestro pueblo y saqueado al país en beneficio de un pequeño
grupo de potentados.
Morena reafirma que sin cambiar el régimen político no habrá salida a los graves problemas
que aquejan a nuestro país. Peña nieto representa más de lo mismo, no nos
dejemos engañar.
EL COMITÉ EJECUTIVO
ESTATAL